MEJORES PRÁCTICAS DE GESTIÓN
El vertido de contaminantes en el sistema de alcantarillado de aguas pluviales o en un curso de agua está prohibido por las ordenanzas locales y las leyes estatales y federales.
Los desagües pluviales conectan las calles con los arroyos
Todos los propietarios e inquilinos tienen la responsabilidad de gestionar las aguas pluviales de su propiedad. Los líquidos o materiales pueden ser transportados por la lluvia, el agua suministrada localmente (por ejemplo, los aspersores) o el viento hasta una calle, una cuneta, un aparcamiento o un desagüe pluvial. Si se aplican en exceso, se derraman o se eliminan de forma inadecuada, componentes como bacterias, sedimentos, nutrientes, materia orgánica, tensioactivos, desinfectantes y sólidos en suspensión pueden ser perjudiciales para la calidad del agua y los hábitats de los arroyos. Es importante seguir las Mejores Prácticas de Gestión (MPA) para cualquier actividad que pueda hacer que el agua se vaya por el desagüe pluvial. Los cambios sencillos tienen un gran impacto.